Clara y Eloy: una boda mágica en la Catedral Vieja de Salamanca y el Hospes Palacio San Esteban

Hay bodas que se quedan grabadas para siempre, no solo por los lugares emblemáticos donde se celebran, sino por la conexión real entre los novios. Así fue la boda de Clara y Eloy, una pareja encantadora que decidió darse el «sí, quiero» en uno de los enclaves más impresionantes de la ciudad: la Catedral Vieja de Salamanca.

Desde el primer momento, Clara y Eloy tenían claro que querían un reportaje de boda en Salamanca que reflejara su personalidad y la esencia de su gran día. Apostaron por una fotografía natural de boda, sin posados forzados, capturando cada emoción de manera auténtica y espontánea. Esa confianza me permitió trabajar con total libertad para plasmar lo que realmente importa: las miradas, las risas, las lágrimas y la complicidad de cada instante.

Desde mi estudio de fotografía en Salamanca, preparo cada reportaje con mimo, cuidando cada detalle para que las imágenes hablen por sí solas. Mi objetivo es que cada pareja se vea reflejada tal y como es, sin artificios.

La ceremonia fue absolutamente impresionante. La boda en la Catedral Vieja de Salamanca estuvo llena de simbolismo y emoción. El entorno histórico, con su luz suave y su atmósfera íntima, hizo que cada imagen hablara por sí sola. Clara entró del brazo de su padre mientras sonaba un cuarteto de cuerda, y Eloy no pudo evitar emocionarse al verla.

Después de la ceremonia, nos desplazamos a otro lugar lleno de encanto: el Hospes Palacio San Esteban. Esta antigua hospedería convertida en hotel de lujo fue el escenario perfecto para el banquete y la fiesta. Sus jardines, sus muros de piedra y sus vistas a la ciudad crearon una atmósfera única, ideal para continuar con una celebración elegante y llena de alegría. Si estás buscando un lugar especial para tu enlace, sin duda, el Hospes Palacio San Esteban para bodas es una elección inmejorable.

Durante toda la jornada, desde los preparativos hasta la fiesta final, el objetivo fue siempre el mismo: narrar una historia real. Como fotógrafo de bodas en Salamanca, con un estudio de fotografía en Salamanca, me siento afortunado de poder formar parte de días tan especiales y de poder entregar recuerdos que durarán toda la vida.

Gracias, Clara y Eloy, por vuestra confianza, por vuestra naturalidad y por hacerme sentir parte de vuestra historia.